-¿En qué colegio va a estudiar tu hija? -Me preguntan la pediatra, las y los vecinos. La familia y hasta el oso de Francisca.
Aún faltan más de cuatro años para que comience la primaria. En este rincón de América, en esta burbuja social, estamos tardíos para comenzar la carrera de caballos que el sistema neoliberal educativo ha implementado. Así, han logrado colegios privados caritativos que hacen el favor de admitir a tu hija, hijo, (hije). Pero, atención, sólo después de desvestir y auscultar terrenos que las madres y padres no han imaginado repasar.
Me pregunto: ¿Será tan importante para algunos de estos educadores saber, por ejemplo, si la familia pertenece a algún club privado?
¿Y la educación pública?, se preguntarán todas, todos, todes les que no pertenecen a este retazo del Perú.
Me gustaría responder a esa imprescindible pregunta con una muestra fotográfica de los gestos en los rostros de infinitas madres y padres ante tal interrogativa.
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